La Real Federación Española de Polo (RFEP) fue fundada en 1972, y ostenta como labor fundamental la organización y regulación oficial del polo en España, contando con la inestimable ayuda de las Federaciones Autonómicas y de los Clubes de Polo.
La RFEP viene definida en sus propios Estatutos como una entidad privada de utilidad pública que, sin ánimo de lucro, reúne dentro del territorio español, a todos los deportistas, técnicos, árbitros, jueces, clubes y federaciones territoriales dedicados a la práctica del deporte del polo, en cualquiera de sus modalidades. Encontramos en esta definición algunos rasgos que conviene destacar, puesto que aun señalando que son entidades privadas, de segundo grado (pues agrupan a clubes deportistas, jueces…), en la práctica tiene un carácter híbrido puesto que goza de funciones públicas delegadas, actuando como un agente colaborador de la administración. Otro dato importante es que en virtud de lo establecido en el articulo 44 de la Ley 10/1990 del Deporte, las federaciones deportivas españolas son declaradas de “Utilidad Pública”, lo que comporta una serie de beneficios fiscales y económicos tanto para la propia federación como para los patrocinadores o esponsores.
En lo que respecta a la integración de los distintos estamentos y organismos que intervienen en el Polo, hay que señalar que conforme con el tradicional modelo continental imperante en todos los países de la Unión Europea, su organización presenta forma piramidal, en cuya base se encuentran los jugadores y los clubes deportivos que se integran en una Federación Autonómica que a su vez pertenece a la Federación Española y esta última forma parte de la Federación Internacional de Polo.
La estructura interna de la RFEP, está organizada según el presente esquema:
a.- Órganos de gobierno y representación:
– El Presidente y la Junta Directiva.
– La Comisión Delegada
– La Asamblea General
b.- Órganos de Administración:
– El Secretario General.
– El Gerente
c.- Órganos Técnicos y Disciplinarios:
– El Comité de Handicaps
– El Comité de Disciplina
El Presidente de la federación es el órgano ejecutivo de la misma; ostenta su representación legal; convoca y preside los órganos de gobierno y representación y ejecuta los acuerdos de los mismos. Además de esas responsabilidades específicas, corresponde al Presidente la de designar y revocar libremente los miembros de la Junta Directiva. El Presidente será igualmente elegido cada cuatro años, mediante sufragio libre, directo, igual y secreto, por los miembros de la Asamblea General.
La Asamblea General es el órgano superior de gobierno y representación de la federación y, como tal, ejerce el control de la gestión federativa, tanto desde el punto de vista deportivo como desde los aspectos económico-financiero y administrativo. Este órgano es renovado mediante un proceso electoral, cada cuatro años, coincidiendo con el año en el que se celebran los Juegos Olímpicos de verano.
El Comité de Hándicaps es el órgano encargado de establecer el hándicap de todos los jugadores federados.
El Comité de Disciplina Deportiva ejerce la potestad disciplinaria sobre todas las personas que formen parte de la estructura orgánica de la federación, y, en general, sobre todas aquellas personas y entidades que, encontrándose federadas, desarrollen la actividad deportiva correspondiente en el ámbito estatal y contra las resoluciones de éste podrá recurrirse ante el Comité Nacional de Apelación, que resolverá en última y definitiva instancia federativa.
Las expectativas depositadas en la evolución del deporte del polo, no pueden ser más optimistas, ya que se prevé que experimente un crecimiento similar al que ha experimentado el golf en Europa, aportando como consecuencia para España, unas infraestructuras y un desarrollo turístico de gran calidad, para ello necesitamos contar con el apoyo de las administraciones, que conscientes de los importantes beneficios tanto a nivel deportivo, de salud, de cultura, y por supuesto económicos, que esta industria genera para nuestra sociedad, están ayudando a conseguir nuestro objetivo que a buen seguro va a contribuir eficazmente en la mejora de la calidad de vida de nuestros ciudadanos.
Desde la Real Federación Española de Polo, se esta realizando una importante labor para servir de puente entre organismos públicos y privados y conseguir aunar los esfuerzos necesarios para que el deporte del polo sea un verdadero motor social y económico.
A corto y medio plazo, los objetivos de la Federación se resumen conforme a la siguiente estructura:
- Aumento número de licencias
- Aumento número de torneos
- Mejora del palmares, resultados deportivos internacionales
- Incremento de los recursos externos
- Presencia en los medios de comunicación
- Re-inversión del producto a los clubes y jugadores